Día de la madre

¡Hola a todos!

Parece que mis últimas entradas son sólo sobre días festivos...

Bueno. A ver cuando arreglo la entrevista que tengo pendiente ;)

Y por fin es 2 de mayo.

¿Qué tiene de especial? Que es el primer domingo de mayo.

El día de la madre.

Nunca me han gustado este tipo de festividades en las que parece que te obligan a acordarte de alguien especial. A mí me da la sensación de que regalas cosas o felicitas por mera obligación.

Pero en estos últimos años de reflexiones nocturnas cuando no consigues pegar ojo me he dado cuenta de que estoy agradecida porque exista tal fecha.

Y es que parece que toda ayuda es bienvenida cuando se trata de recordar quién eres y gracias a quién te has convertido en lo que hoy por hoy eres.

A la vista de todos estos años, te das cuenta de cuánto ha hecho por ti. Y cuánto le debes.

El día de la madre es el mejor momento para recordarle que la quieres. Que le agradeces todo lo que ha hecho por ti desde que eras nada más que una célula en división.

Muchos tratamos de demostrarselo todo el tiempo, aunque sea con pequeñas cosas tales como lavar tú los platos después de comer para que ella pueda descansar, hacer la comida de vez en cuando, ayudarla con las compras...

Todo esto parecen nimiedades, pero no es así. Dicen mucho más pequeños gestos durante todo el año que un simple y llano gesto el primer domingo de mayo.

Lo peor de todo es que hay gente que cuando llega este día, hace una pequeña representación teatral sacando su lado más histriónico. Y el resto del año actúan como si de huérfanos estuviesemos hablando.

Así que recuerda que por mucho que creas que te quedan infinidad de días de la madre por delante, todos tenemos los días contados. Es así. No es dramatismo. Es la verdad.

Recuérdale más a menudo que te importa y que la apoyas. Soportan una carga importante sobre sus hombros y eso las hace vulnerables muchas veces. Demasida presión. Y eso hace que, en su papel de madres, traten de ocultar sus problemas.

Todo para que no nos preocupemos. Todo para poder ocuparse los 365 días del año de su familia.

Ellas siempre se ponen al final de la lista.

Por eso tenemos que recordarles que las posiciones en esa lista varían constantemente. Que deben cambiar.
Por eso debemos mostrar un poco más de interés por lo que les pasa cada día y tratar de pasar más tiempo con ellas.

Recordad que se nos acaba el tiempo. Y no se recupera.

Haced las paces con ellas, id a visitarlas allá donde estén, mantened su recuerdo en vuestra memoria aquellas personas que por desgracia las hayáis perdido, llamádla aquellos que estéis fuera y mandarle un regalo por correo.

Haced lo que tengáis que hacer para recordarles que, aunque no siempre lo mostremos, nos preocupamos por ellas.

Porque por ahora y hasta que no llegue el momento sólo vemos desde el punto de vista de un hijo. Porque algún día estaremos en su lugar.

¡FELIZ DÍA DE LA MADRE A TODOS!

Un beso,

Alice

P.D: he aquí el pequeño regalo (a parte de uno de verdad, por supuesto) que le voy a hacer a mi madre.

¿Una tontería? Puede ser. Pero me parece que le doy mucho más que si simplemente le regalara unos zapatos.

Es una pequeña parte de mi, hecha con todo mi cariño (y mi tiempo. Madre de dios; me llevó casi 4 horas).
Y ahora me voy a dormir, que ya me va entrando el sueño que andaba buscando. Y mañana tengo que levantarme temprano. Desayuno sopresa para mi madre ;)